Esta primera promoción de Educadores de Rioja ha sido muy selectiva, ya que los 24 candidatos presentan perfiles con amplia experiencia profesional y formativa. Han participado en el programa por invitación directa del Consejo Regulador a través de las agencias que gestionan las campañas de comunicación de Rioja en los 8 países de los que proceden: 4 de Alemania, 5 de China, 3 de México, 3 de Suiza, 2 de Reino Unido, 3 de Estados Unidos, 2 de Rusia y 2 de Suecia.
Una vez certificada la primera promoción se hará el lanzamiento a nivel mundial, para lo que se habilitará un portal digital oficial del programa a través del cual los candidatos podrán solicitar su inscripción a lo largo del año explicando los motivos por los que quieren ser educadores del vino de Rioja.
El perfil que se considera más idóneo es el de aquellas personas que tengan interés por la formación y posean conocimientos y experiencia profesional en el mundo del vino de al menos 2 años, bien en la comunicación, la educación o la sumillería, bien en el comercio y distribución de vinos.
Quienes sean admitidos en base a su currículo y experiencia deberán cursar un programa educativo homologado por la D.O.Ca. Rioja que exige superar diversas pruebas teóricas y prácticas, comenzando por un curso online con un temario específico, que ha sido creado en colaboración con el Basque Culinary Center, a cuyo patronato pertenece el Consejo Regulador. Además de otras pruebas, como las de cata técnica, el programa finaliza con una estancia en Rioja junto con el resto de candidatos a educadores para completar la formación y realizar una prueba final.
El objetivo perseguido es que el futuro educador de Rioja desarrolle unas competencias no sólo basadas en unos conocimientos específicos sobre los vinos de Rioja y su región, sino también en sus habilidades para comunicar la pasión por los vinos de Rioja.
Los educadores podrán desarrollar actividades formativas por su propia cuenta o bien por cuenta del Consejo Regulador o las bodegas e importadores de Rioja. Será requisito para renovar la certificación, que tiene una validez de 4 años, cumplir una serie de compromisos como el de impartir un mínimo de actividades formativas, de las que podrá expedir diplomas avalados por el Consejo Regulador a los alumnos asistentes.
© Javier G. Paradelo
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